cazadores
Su intención era cazar para la cena. Regados con vino, atraparon una corzuela. Carnosa y mansa. Frágil, dúctil ante los trazos del cuchillo. Sabrosa. -Esto es lo más rico que comí en mi vida.- comentó uno. -Brindo por eso- celebró otro. El fuego alcanzó para medio cuerpo. La otra mitad cabía en la conservadora. La fiesta se desmadró hasta el día siguiente. El monte no era divertido de día y emprendieron el regreso. En el camino, los detuvo una cuadrilla de “Control de caza y pesca”. Pura rutina. Revisaron todo, como siempre. Nada raro encontrarían. Entre bromas, bajaron todo de la camioneta. Medio cuerpo de mujer descansaba en la heladera de los cazadores.